“Estoy muy contento de compartir con ustedes este momento. Cuando me lo mencionaron, me emocioné mucho porque estuve viviendo cuatro años en la pensión del Club. Llegué muy chico y River prácticamente a mí me terminó de formar como persona y como futbolista”, indicó Radamel Falcao García, en una charla de más de una hora con los jóvenes jugadores de las Inferiores.
El delantero volcó toda su experiencia y contó cómo fueron sus primeros momentos en Núñez: “Tenía muchísima expectativa y mucha ilusión. Soñaba con jugar en la Primera de River, consolidarme e ir poco a poco. Quería conseguir mi sueño y conseguir el objetivo, que era jugar al fútbol profesional. Y estando en River me encontré con un grupo de personas maravillosas, compañeros que me abrieron las puertas y me ayudaron”.
El colombiano también recordó los momentos difíciles: “Era muy difícil el no poder jugar porque no podía demostrar toda mi capacidad. Tuve que ser muy fuerte mentalmente, aguantar, perseverar y tratar de crear una estrategia para luego poder tener continuidad y empezar a jugar”.
Falcao siguió: “Yo era muy de preguntar: cómo era Saviola, cómo era Aimar y qué hacía Cavenaghi, ese tipo de cosas. Les preguntaba mucho a los utileros o quizás a alguien que haya tenido contacto con ellos y ahí iba aprendiendo, porque me interesaba saber qué hacer para poder cumplir mi sueño”.
A su vez, resaltó la importancia de la educación: “Me parece muy importante el poder continuar con una educación o preparación a la par del crecimiento en el fútbol. Te das cuenta cuando vas al exterior o vas a Europa a jugar. Te das cuenta de la educación y de la manera de poder comunicarse, de entender culturas, de respetar. La educación siempre te da la posibilidad de abrir tu mente, de aprender, de poder conocer un mundo diferente al nuestro”.
Luego de reconocer que “cuando pasas por River estás preparado para cualquier club en el mundo”, les dejó un último consejo a los chicos: “Luchen por el sueño que tienen. Hagan las cosas con pasión y con el corazón. Cada entrenamiento, váyanse satisfechos a la pensión o a su casa, sabiendo que han dado el 100%”.