Petroli: "A la ansiedad hay que transformarla en energía positiva" El arquero de River habló con el Sitio Oficial sobre su actualidad en el Club, luego de una nueva pretemporada con la Primera División.

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Por: Rubén Sagarzazu


Dicen todos los que juegan mucho tiempo al fútbol que hay que disfrutarlo y que hay que divertirse dentro de la cancha, porque el camino que hay que recorrer para llegar a la Primera es difícil. Muchos años en las Inferiores que demandan sacrificio, esfuerzo diario. Aprender, superarse, competir y mantener siempre un rendimiento alto para tratar de cumplir el sueño. Y son pocos los que logran ese objetivo.

Franco Petroli, arquero de la Reserva, lo sabe y por eso a los 20 años disfruta de este presente, pero es consciente de que aún no ha conseguido nada. Los buenos años en Inferiores que lo catapultaron a la Reserva y a ser tenido en cuenta por Gallardo para las dos últimas pretemporadas. Su experiencia en las selecciones sub-15, sub-17 (campeonatos sudamericanos) y sub-20 (sudamericanos y Mundial en Corea del Sur), que le dieron una enseñanza que aprovechará de por vida. Todo esto lo resume así: “Todo lo que viví hasta el momento en el fútbol es muy lindo. Y lo que me pasa me motiva y me abre la cabeza para todo lo que viene. La pretemporada con la Primera, jugar en la Reserva. Esperando las oportunidades de a poco y cuando me toquen poder aprovecharlas”.

Cuando estás tan cerca de lograr el sueño, ¿cómo hacés para manejar la ansiedad?
Hay que tener tranquilidad, enfocarse en progresar todos los días un poco más. Tener la mente fría, porque hay días en que te toca entrenarte con la Primera, otros bajar a Reserva o atajar en la Cuarta División. Es una época de transición, a la que hay que sacarle el máximo provecho. A la ansiedad hay que transformarla en energía positiva. Y la clave para mí es entrenarte y entrenarte para cuando llegue la chance.

¿Con quiénes hablás de este tema?
Lo charlo mucho con mi familia y también recibo el consejo de amigos. Y acá en River con Tato Montes, que es el entrenador de arqueros, con mis compañeros y el cuerpo técnico. Eso me ayuda para calmar ese cosquilleo que te agarra cuando estás cerca de lograr algo por lo que tanto luchaste.

¿Cómo fue la experiencia de haber realizado la segunda pretemporada con la Primera?
Para mí fue un orgullo poder estar con el plantel de Primera, donde es un mundo distinto. Es otro ritmo en los entrenamientos y en los trabajos técnico-tácticos. En mi puesto específico, por ejemplo, no es lo mismo enfrentarte a Scocco, Pratto, Mora y Borré en un trabajo táctico o una práctica de fútbol. Porque son delanteros de mucha jerarquía y clase, que saben todo a la hora de definir. Eso te da otro aprendizaje como arquero y si lo asimilás bien, te hace crecer como arquero y te dura para toda la vida. Y lo mismo cuando te toca hacerlo con los defensores como Maidana y Pinola y los demás chicos. Sin dudas, la experiencia te hace tener que decidir y pensar mucho más rápido jugadas que no te tocan vivir en Reserva o Inferiores.

¿Cuando estás en ese mundo pensás que estás muy lejos de llegar a la Primera?
Lo que yo pienso es que si uno se entrena, se prepara y es profesional en lo que hace, el momento de estar en la Primera es normal cuando uno es pibe. Te van a faltar cosas, porque no es lo mismo entrenarte todos los días que de vez en cuando.

¿En qué crees que tenés que mejorar para estar ahí?
Mejorar hay que hacerlo en todo. Lo fundamental es potenciar lo que tengo y corregir las falencias que uno tiene. Y aprender todo lo que te enseñan los que saben y tienen mucha experiencia y sabiduría en esto.

¿Tuviste contacto con Gallardo?
Me dijo que esté tranquilo. Que haga lo que venía haciendo y que no tenía que demostrar nada. Y que estaba ahí para aprender y seguir creciendo.

Te tocó convivir con Armani, Lux y Bologna, que son arqueros con mucha trayectoria e historia.
Armani es uno más. Un muchacho muy humilde, hablamos constantemente y cuando a lo mejor cometés algún error, te lo corrige. Lo mismo con Lux y el Beto Bologna, que están siempre alentándote y enseñándote cosas. Eso es muy valioso, porque se fijan en vos arqueros que han hecho muchas cosas importantes en el fútbol.

¿Qué fue lo que más te sorprendió?
La humildad que tiene este grupo. Lo rescato totalmente, yo me sentí demasiado cómodo. Es un orgullo estar en grupo así, que ha ganado tanto. Y de repente te traten como si fueras uno más desde hace tiempo.

¿Y a Gallardo cómo lo ves?
Alguien que tiene mucha personalidad, que sabe lo que quiere. Que está continuamente trabajando y se dedica al fútbol un ciento por ciento.

Para ustedes está bueno que ya haya muchos jugadores de Inferiores jugando en la Primera o integrando el plantel.
Eso está bueno y nos motiva mucho a los que estamos en el Club desde hace tiempo. Y es mejor todavía que lo maneje el propio Gallardo, porque sabés que si hacés las cosas bien podés estar hoy o mañana en la Primera.

Tenés como coordinador de arqueros al Pato Fillol. ¿Qué cosas te dice o marca?
El Pato te corrige cosas específicas como puede ser, por ejemplo, cómo manejar bien el juego aéreo o algunas cosas que te hagan mejorar. También te da consejos que son útiles para ser jugador, que hay que mantener la esencia que uno tiene para jugar al fútbol y después no volverse loco y ser paciente, porque así lo que uno desea va a llegar.

Estuviste en las selecciones juveniles. ¿Qué experiencia sacaste?
Fue increíble. Estar en todas las categorías, jugar los torneos sudamericanos y lo máximo fue el Mundial Sub-20 en Corea del Sur. Ser jugador de Selección es ser profesional ya desde chico. Estar en ese predio, viajar y representar a tu país te enseña que hay que trabajar siempre. Y tener la personalidad para saber resolver situaciones adversas que te toquen en la carrera como jugador.

Por último, repasa cómo llegó a River, quiénes son sus referentes y alguna historia particular de su corta carrera: "Yo soy de Avellaneda, Santa Fe. Estuve dos veces acá. Primero llegué a los 10 años y a los seis meses me fui. Y luego regresé a los 11 y acá estoy. En mi ciudad jugué en dos clubes, Barrio Norte y Defensores de la Costa, ahí pasé mi infancia y me divertía. Allá jugaba de todo, pero mi viejo fue arquero de Barrio Norte. Y el día que tuve que hacer la prueba le dije ‘¿de qué juego’? y, obviamente, me dijo ‘de arquero’. Mi papá se llama Sandro, es el que más me aconseja y me critica. Más por haber jugado en este puesto. Yo por eso lo respeto. Además las que más me alientan son mi mamá (Yanina) y mi hermana, Belén. Mis referentes son los tres arqueros que están acá. También me gustan mucho, Neuer, Courtois y el Patón Guzmán".